Gabriel San Román, Tantoyuca.

Con Scholastica 360°, Gabriel San Román fue aceptado al MIT Sloan Fellows MBA en MIT Sloan School of Management y al MBA en Babson College, en Marshall School of Business de University of Southern California y en IESE Business School de University of Navarra.

“Hola, mi nombre es Gabriel San Román. Apliqué a los programas de Sloan Fellows del MIT. Al programa de MBA de Babson y al IBEAR MBA de USC y al IESE. Me decidí por irme al MIT y estuve en Scholastica 360°”.

“Es un programa que te ayuda a identificar qué es lo que buscas con un posgrado y luego, cuáles son tus opciones para ese posgrado”.

“Y ya que tienes bien claro para qué quieres estudiar el programa y cuál es el programa que es la mejor opción para ti, pues te hace toda la estructura para lograr ese objetivo. Y la verdad, la parte más padre, que al principio se me hizo un poco como que me sacaba de onda, es la parte muy objetiva de decirte las cosas, porque siento que eso es muy importante, o sea, el que me hayan dicho de inicio cuáles eran mis posibilidades. Como que eso me hizo estar muy consciente de que necesitaba buscar varias opciones”.

“Mi experiencia en el MIT ha sido una experiencia que me ha ayudado a entender temas que para mí eran completamente nuevos”.

“Adriana me ayudó a desarrollar muy bien la narrativa. O sea, al final de cuentas era lo que iba ocupar para venderme. Y sí, creo que fue un gran diferenciador para mi narrativa, de hecho, traté de especificar de dónde era, que es un pueblo muy pequeño y eso es lo que Adriana me dijo que tenía que aprovechar, ya que la mayoría de los aplicantes venían de ciudades grandes. Entonces una de las cosas que debía de ocupar era ese diferenciador que tenía y mencionarlo en mis ensayos, mencionarlo en el video. Creo que eso fue lo que más me ayudó.”.

“En retrospectiva, lo que más me ayudó de Scholastica fue haber trabajado mi historia, entender cuáles eran mis objetivos y venir con un enfoque de qué era lo que quería lograr en este año, ya que es muy fácil perderte con tantas materias y tantas oportunidades”.

“La parte más complicada es la aplicación, ya que hay que invertirle tiempo a los ensayos, a los exámenes y balancearlo con el trabajo, pero ya cuando estás acá te das cuenta de que todo valió la pena. Me ha ayudado también a profundizar en temas de operaciones y finanzas que para mí eran importantes en el crecimiento como profesionista y también me ha ayudado y me ha dado tiempo para reflexionar sobre cómo quiero que luzcan los siguientes años de mi vida profesional”.

---