Perfil competitivo: Especialista o Generalista

El mundo, en especial el actual, siempre ha sido cambiante. De seguro has escuchado alguna vez el término VUCA: Volatilidad, Incertidumbre, Complejidad y Ambigüedad: así es nuestro entorno. En este contexto, ¿qué necesitas para enfrentar los nuevos retos y necesidades de esta sociedad? ¿Cómo adaptarte a estos cambios para siempre estar a la vanguardia? A lo largo de tu crecimiento académico, probablemente te hayas preguntado si la respuesta se encuentra en especializarse o adquirir habilidades generales que puedas aplicar en diversos ámbitos, y así abrirte las puertas para distintos trabajos. No obstante, la respuesta no es fácil: depende de tus habilidades, tus objetivos y de los retos a los que te estés enfrentando en tu situación específica. En este artículo te compartiremos cuáles son algunos pros y contras de cada uno de los dos extremos, y cuándo es mejor elegir cada uno.

En un primer aspecto, el punto principal es conocer cuál de las dos opciones te ayudará a ascender en la escalera profesional. En palabras de W. Shakespeare “Sabemos lo que somos pero no lo que podemos llegar a ser” y eso es lo que debemos determinar para iniciar nuestra proyección profesional. Un especialista tiene experiencia y aptitudes para desempeñar determinados puestos, lo que implica volverse una persona muy técnica, capaz de saber cómo resolver ciertos problemas a los que se enfrenta la empresa. En cambio, un generalista, sin ser experto en un sector específico, es capaz de tener un panorama más amplio, lo que les obliga a ser más creativos, flexibles, innovadores y resilientes.

Si tu inclinación es más a la especialización, es probable que no desempeñes cargos de supervisión, lo que no necesariamente implica “falta de liderazgo” o un menor sueldo: te vuelves una persona necesaria cuando se necesitan conocimientos o aptitudes concretas para solucionar situaciones urgentes. Si quieres ser más generalista, seguramente tendrás oportunidad de desenvolverte muy bien en diversos medios, vigilando que las personas involucradas en la resolución de inconvenientes realicen su trabajo de forma adecuada: te vuelves una persona que comprende el panorama completo, para así llegar a resultados satisfactorios, eficientes y creativos.

En este tenor, vale la pena recalcar que ninguno de los dos es prescindible, pero ninguno es suficiente por sí solo. Imagínalo de la siguiente manera: tienes que colgar un cuadro. Si eres un carpintero, probablemente solo pensarás en un clavo, un martillo y como colocar el cuadro en cualquier lugar de tu hogar: este es el pensamiento de un especialista, eres experto en lo que haces. Ahora bien, siendo un generalista, probablemente llegues a la conclusión de que hay lugares específicos donde se ve mejor el cuadro, pueden utilizarse más de una herramienta concreta para colgar un cuadro y además sabes que necesitas a una persona que pueda realizar ese trabajo.

Por ello, en vez de pensar qué es lo mejor para tener un mejor puesto o cumplir tus objetivos laborales, reflexiona en qué es lo que más se adecúa a tu perfil: ¿Qué te gusta más? ¿Qué te ves haciendo? ¿Eres un experto en un campo determinado? o ¿Eres mejor visualizando panoramas completos y tomando decisiones? Obtener las respuestas a estas preguntas te permitirá llegar a la conclusión de qué es lo mejor para ti y el objetivo profesional que deseas. Después de ello, piensa en tu trabajo soñado: ¿Qué puestos se están buscando? ¿Cómo puedo ser el mejor especialista o el mejor generalista, para llegar a mi realización profesional?

Probablemente desees trabajar en una empresa multinacional. Ésta necesita un director de logística o de cadena de suministro – un especialista – que tome decisiones respecto a estas necesidades específicas. También, la corporación requiere de un administrador o supervisor, que observe diferentes áreas al mismo tiempo y sepa coordinarlas para que las operaciones se desarrollen de la manera ideal: un generalista.

Si bien, ambos extremos son esenciales, ningún extremo, en ninguna circunstancia, es positivo. Ni el carpintero que no tenga al menos una idea de espacio y de dónde se puede colgar un cuadro; o el generalista que no sepa al menos cómo se maneja un martillo; podrán sobresalir en un mundo tan competitivo como el actual. Parte de la realización profesional implica salirte de tu zona de confort y de tu mismo expertise, para poder observar, pensar, criticar, analizar y realizar propuestas de valor fuera del ámbito donde comúnmente te desempeñas, o donde te sientes más cómodo. Un especialista que sepa de administración, o un generalista que tenga conocimientos técnicos y especializados, son elementos sumamente valiosos para cualquier empresa, organización o institución.

De allí que, independientemente de si te enfoques más en ser un especialista o generalista, tendrán mayor peso para tu realización profesional tu motivación y tu aprendizaje. Recuerda que es igual de importante conocer a profundidad un tema para implementar herramientas específicas, como tu desempeño manejando grupos y supervisando para que, cada uno desde su trinchera, cumpla lo que le corresponda. Si puedes realizar ambas acciones, independientemente de tu rol, tendrás un valor importante e imprescindible (a pesar de que, en la actualidad, nadie es imprescindible).

Adáptate, amplía tu panorama, y no solo pienses en si eres mejor de un lado o del otro, ve más allá y vuélvete el mejor tú. El mundo profesional necesita de mentes disruptivas, para atender a los nuevos retos y desafíos que la globalización presenta. ¡Haz de tu perfil el más competitivo! Desarróllate en lo que eres bueno, adquiere esas habilidades que nutrirán tu perfil. ¡No solo seas uno: toma un poco de los dos! Combinar estos dos aspectos harán de tu trabajo un área de oportunidad y crecimiento en cualquier aspecto: personal, profesional y a nivel empresa.


Referencias

Vikram Mansharamani (CNBC). Harvard lecturer: ‘No specific skill will get you ahead in the future’—but this ‘way of thinking’ will. (Junio15, 2020). Recuperado de: https://www.cnbc.com/2020/06/15/harvard-yale-researcher-future-success-is-not-a-specific-skill-its-a-type-of-thinking.html

Florenta Teodoridis, Michael Bikard y Keyvan Vakili (HBR). When Generalists Are Better Than Specialists, and Vice Versa (Julio 31, 2018). Recuperado de: https://hbr.org/2018/07/when-generalists-are-better-than-specialists-and-vice-versa

Martin Luenendon (Cleverism). The Ultimate Career Choice: Generalist vs. Specialist (Marzo 27, 2019). Recuperado de: https://www.cleverism.com/ultimate-career-choice-generalist-vs-specialist/#:~:text=A%20broader%20approach%20and%20wider,skills%20are%20becoming%20increasingly%20important.



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